La adversidad puede sacar a la luz lo mejor o lo peor de las personas. Y en un equipo, el dolor, la bronca, el sentimiento de injusticia, dispersa o une. A Talleres, al plantel de Talleres, los problemas económicos sufridos en la temporada lo ayudaron a forjar un grupo granítico, dispuesto a realizar un esfuerzo espartano en pos de terminar de la mejor manera el recorrido por la Copa Santa Fe, un andar que en lo deportivo se asemejó a una moderna autopista, pero que fuera del rectángulo estuvo repleto de baches. Como esquivarlos, con pericia y amor por el deporte, fue el sello distintivo.

La nota completa, por David Ferrara

Fotos Santa Fe Deportes, Prensa FebaSantaFe y SantaFeBasket

Todas las fotos

La adversidad puede sacar a la luz lo mejor o lo peor de las personas. Y en un grupo, el dolor, la bronca, el sentimiento de injusticia, dispersa o une. A Talleres, al plantel de Talleres, los problemas económicos sufridos en la temporada lo ayudaron a forjar un grupo granítico, dispuesto a realizar un esfuerzo espartano en pos de terminar de la mejor manera el recorrido por la Copa Santa Fe, un andar que en lo deportivo se asemejó a una moderna autopista, pero que fuera del rectángulo estuvo repleto de baches. Como esquivarlos, con pericia y amor por el deporte, fue el sello distintivo.

Allá por noviembre, cuando se armaba la Liga Provincial, Talleres de Villa Gobernador Gálvez y Platense estaban en boca de todos como los grandes candidatos y probables finalistas. Y los pronósticos eran fundados, porque aunque los de VGG fueron un poco más sólidos que los de Reconquista en la etapa regular, cuando llegó la hora de la verdad, ambos se las arreglaron para llegar a la instancia clave en busca del título y del ascenso al Federal.

Se podría usar un manual de las frases hechas para describir una serie que estuvo marcada por las localías dominantes, quizás con una aparente supremacía de Talleres que no siempre se tradujo en el marcador. O tal vez simplemente no pudo ser contundente en su control porque un rival experimentado no lo dejaba. Lo cierto es que los de Lupo tomaban las riendas de los juegos, pero Galligani y compañía se las arreglaban para desbocar el partido y generar zozobra a más no poder.

El 2 a 0 se transformó en 2 a 2 porque Platense terminó de concretar todos sus amagues y se hizo fuerte en el Gigante del Boulevard y porque Galligani estuvo pletórico.

Llegaban, llegaron, al quinto duelo, como nunca antes en esta corta pero intensa vida de la Copa Santa Fe (Santa Paula 3 a 0 a Atlético San Jorge y Sport 3 a 0 a Platense) y como hacía rato no se veía en la definición de la Liga Provincial santafesina, esa que suele poner a equipos animadores en el Federal.

Y en un partido repleto de nervios, cercano al desborde emocional afuera y adentro, fue Talleres el que realizó un movimiento ajedrecístico que podría parecer un detalle pero que a la postre fue determinante en el 86 a 82 final y en el título de los de Villa Diego: defendió con persecución asfixiante a Galligani de la mano de Medrano, pero cada vez que el base quiso jugar el pick and roll central, el step de uno de los grandes lo terminó doblando. Esto puso incómodo al veloz pibe de San Justo, que a veces generó con su descarga (no siempre bien aprovechada por los compañeros) pero que en la mayoría se vio complicado para decidir. Su equipo lo sintió, pero no se rindió, porque si algo le sobra a Platense es coraje. Desde las bombas de los eternos Frigeri (27) y Piedrabuena (25) y los rebotes en ataque los visitantes construyeron la resistencia y le regalaron a la multitud en la cancha y al récord de seguidores por streaming y 5RTV un primer tiempo del alto voltaje.     

Pero en el tercer parcial los locales comenzaron a torcer el destino de la serie final, lastimaron con Chiana (31) cerca del aro y una vez más el interno más desequilibrante del certamen y mostraron personalidad para aguantar los tremendos embates visitantes. Borsellino, Camino, Gandoy, Chiana e incluso Lupo no son nuevos en esto de ganar finales y se notó. Platense dejo hasta lo que no tenía, empeñó su alma para llegar al suplementario, pero la T siempre tuvo un poquito más, ese puñado de gramos basquetbolísticos que inclinan la balanza. Y en una temporada más sufrida que disfrutada, fue el momento de gozar a lo grande y de generar el desahogo, con la familia, los amigos, los que ayudaron a no caer, y sobre todo el compañero, el de al lado que estuvo férreo en la muralla humana contra el mal momento. Porque ante la adversidad Talleres, el plantel de Talleres, eligió unirse y jugar al básquet. Salud campeón. 

SÍNTESIS

TALLERES 86: Franco Borsellino 15, Matías Medrano 8, Juan Manuel Gandoy 11, Agustín Chiana 31, Leandro Faranna 12 (fi), Juan Pablo Camino 9, Joaquín Cingolani 0, Mauro Burgos 0. DT: Juan Pablo Lupo

PLATENSE 82: Matías Galligani 5, Juan Frigeri 27, Marcos Piedrabuena 25, Lucas Reatti 11, Fernando Borda 5, Sebastián Molina 4. DT: Claudio Sposetti.

ESTADIO: Matías Dinsmann

ÁRBITROS: Fabio Alaniz, Danilo Molina y Gerardo Capdevila

PARCIALES: 24/21, 37/34 y 60/51